Hoy continuamos con los pasatiempos, en concreto con el de buscar una hipotetica imagen para la carta Cumbre de la edición en castellano. Recuerdo que nada de lo aquí se diga tendra repercusión, que no es más que para pasar el rato.
Cumbre es una de esas cartas tontas, que casi siempre se juega como punto de operaciones, jugarla con el DEFCON a 2 es poco más que un suicidio a menos que se dominen 3 o 4 regiones más que el oponente. Casi me hubiera gustado que en lugar de la Cumbre hubieran dedicado una carta al match entre Spasski y Fischer. Pero la cumbres fueron importantes en la Guerra Fría. La primera, la protagonizaron Brezhnev y Ford, ambos en la foto, y ayudo a lo que se conoce como distensión.. fue en Vladisvotok, en 1974.
Cuando Brezhnev y Ford se entrevistaron en vladivostok el 23 y 24 d noviembre de 1974, el secretario general se mostró inquieto e inseguro. En una repetición de su primera entrevista con Nixon en Moscú, el dirigente soviético invitó a Ford y Kissinger al compartimento que ocupaba en un tren especial para instaurar una cálida relación humana. Para romper el hielo, les ofreció té con coñac. Recordó el pacto personal con Nixon «en una sola cosa: no inmiscuirse en los asuntos internos de cada uno». Cuando Ford preguntó cómo iban a continuar negociando, el secretario general le interpeló vivamente: «Eso dependerá de nosotros dos. Es evidente que el mundo está pendiente de nosotros y que la opinión pública mundial esta interesadísima en conseguir que no haya ninguna guerra nuclear». Durante los minutos siguientes, Brezhnev expuso su propia visión de la carrera armamentística nuclear: «No hemos conseguido ninguna limitación real, y de hecho hemos estado acelerando más y más la carrera armamentística. Es un error. mañana la ciencia puede presentarnos unos inventos que ni siquiera podemos llegar a imaginarnos hoy, y la verdad, no sé hasta donde podemos llegar en el incremento de la llamada seguridad. Quien sabe, tal vez, pasado mañana la carrera armamentística llegue incluso al espacio exterior. La gente no sabe todo esto, de lo contrario realmente nos habría mandado al infierno. Estamos gastando miles y miles de millones de dolares en todas estas cosas, miles de millones que estarían mucho mejor gastados en beneficio de la gente.» Un imperio fallido. Vladislav Zubok. Crítica 2008. pág 367.
El libro de Zubok es curioso, retrata una imagen de Brezhnev mucho más respetable de lo habitual, en cualquier caso Brezhnev iría poco a poco siendo devorado por su adición a las medicinas y sus ataques. Poco quedaba de él cuando los halcones que habitaban en Washington y en Moscú acabaron con la distensión y volvieron a poner al mundo en vilo.
En cualquier caso la cumbre entre Brezhnev y Ford merece otra foto. Demasiado pequeña. Y el encuentro proporciono algunas instantáneas mucho más gráficas que bien podían ilustrar la carta de Cumbre.
Ya sabéis si queréis poner foto a Cumbre/Summit deja un comentario con el enlace a la imagen que la incorporo a esta misma entrada.
Cumbre. Solo se me viene una imagen a la cabeza. Aunque no es de la Guerra Fria.
Hago que se vea en el comentario, pero no la subo a la entrada. No es de la Guerra Fría.
Da la sensación optica de que Aznar lleve un sombrero mejicano xD
Estaba trabajando en ello